jueves, 7 de febrero de 2019

Capítulos que tocan fibras

Hay muy pocas series que yo haya seguido desde el principio o que simplemente siga. 
En la era del Netflix yo solo lo he usado en casa de algún amigo y no lo he echado en falta jamás. No mentire diciendo que no agradezco el moviestar (sobre todo cuando hay una princesa por casa que quiere ver dibujos) pero soy totalmente consciente de que no lo necesito.
Hoy mientras hago cosas que no debo me obligo a parar, así que vi el último capítulo de Anatomia de grey, para mantener las buenas costumbres en ingles subtitulado, tocaban el tema de la muerte algo recurrente en una serie de médicos, más en una en la que cuando no saben que hacer con un personaje muere o muere alguien cercano.
Pero hoy... Me toco la vena sensible, puede que el embarazo tenga algo que ver. 
La aceptación, la vida que vuelve a renacer imperfecta cómo es, la necesidad, muchas veces de perder todo para empezar a vivir. 
La necesidad de contar a los que ya no están a esos niños que ya se fueron los logros del día, sobre todo cuando arriesgamos algo...
Puede que fuera por los que perdí, que fuera por el que está por llegar o por el miedo que pase este lunes sólo con la posibilidad de que le pasara algo.
Pero este capítulo me hizo escribir, me hizo sentir, me hizo no esperar a tener tiempo, me hizo consciente una vez más de que la vida es muy corta y la gente que amas mucha.
Permitamosnos vivir, sentir, compartir, amar, enfadarnos... 
Permitamosnos la luz y la oscuridad porque todo, absolutamente todo es lo que nos forja.
Se que es un texto sin forma, que salta de tema en tema, como soy yo, como desquicio yo cuando hablo. 
Mi mente parece nunca focalizar aunque realmente este centrada.
La ilógica del estar.